domingo, 14 de septiembre de 2025

 

INSTITUCION EDUCATIVA CHAMPAGANAT

AÑO LECTIVO 2025

AREA DE EDUCACION ARTISTICA

GUIA # 4 DE HISTORIA DEL ARTE

LA CULTURQA AYMARA

GRADO UNDECIMO



Aimaras: quiénes son, historia y características de esta cultura

Un resumen de las características de los aimaras, una cultura precolombina de de Bolivia y Perú.



 

Los aimaras son uno de los pueblos amerindios más famosos a nivel mundial. Son de los pocos cuya lengua supera el millón de hablantes, además de ser muy conocidos por el uso que hacen de la planta de la coca y criar alpacas y llamas.

Viven en los altos Andes, visten ropas coloridas con su característico sombrero y tienen una historia y cultura fascinantes que ha sobrevivido no solo a la conquista española sino también a una anterior, la de los incas.

A continuación, vamos a profundizar más sobre los aimaras como grupo étnico, descubriremos su historia, sus elementos culturales, su lengua y su particular concepción del tiempo.

¿Quiénes son los aimaras?

Los aimaras, también escrito “aymara”, son un grupo de indígenas que viven mayormente en el altiplano andino de Bolivia y Perú, encontrándose sobre todo cerca del lago Titicaca. Habitan esta región desde tiempos precolombinos, extendiéndose en la actualidad entre el occidente de Bolivia, el noroeste de Argentina, el sureste de Perú y el norte de Chile. También se les llama “collas” aunque este nombre no se debe confundir con la etnia del mismo nombre que vive al norte de Chile y noroeste de Argentina.

Este grupo étnico ha tenido una historia marcada por constantes cambios a causa de pueblos dominantes, entre los más importantes la conquista por los Incas en 1430 y la posterior colonización española. Antes de estos eventos, estaban divididos en varios estados independientes que se concentraban sobre todo en las actuales repúblicas de Perú y Bolivia.

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Aunque no se conoce exactamente cuál fue el país aimara propiamente dicho más antiguo, se tiene sospecha que su antecesora, la civilización tiahuanaco, habitaba la región en torno el 2000 a. C., siendo considerado como el primer estado aimara o “protoaimaras”. No obstante, a lo largo de la mayor parte de su historia los aimaras han vivido en doce reinos separados, punto débil que fue estratégicamente aprovechado por los incas y que hizo que acabaran siendo sus súbditos. La última nación aimara independiente fue la de Lupacas en 1400.

Al ser incorporados al Imperio Inca estos pueblos pasaron por un fuerte grado de aculturación, algo muy posterior e intenso a la conquista española de 1535. No obstante, con la llegada de los europeos pasarían por otra aculturación, acontecida en tiempos coloniales. Con las posteriores independencias de los países latinoamericanos, los aimaras han estado bajo la jurisdicción de las repúblicas de Perú y Bolivia modernas, además de parte de Chile y Argentina, estando bajo regímenes políticos que los han tratado de forma muy diferente.

El origen de su nombre

El término “aimara” aparece durante los tiempos coloniales y es de origen muy incierto. De hecho, los ancestros de los actuales aimaras nunca se denominaron a sí mismos de esta forma y los incas los llamaban “collas”.

No fue hasta 1559 que Juan Polo de Ondegardo y Zárate, cronista virreinal español, los denominó “aymaras” a partir de la información lingüística recogida en la región del Collao. Por extensión, su lengua acabó siendo llamada “aymara” también, aunque ellos mismos la denominaban “jaqi aru” (literalmente “humanidad” y “lengua”)

Su historia

Se cree que el actual pueblo aymara como etnia más o menos consciente de sí misma y con una identidad que ha sobrevivido hasta el día de hoy tiene sus orígenes en lo que se ha denominado los Señoríos Aimara o los Doce Reinos, que existieron en torno el 1200 y 1400 d.C. Sin embargo, podríamos remontarnos a tiempo todavía más anteriores, entre 500 y 1000 d.C, cuando existió una cultura llamada Wari, aunque también se tiene sospecha que la cultura tiahuanaco del 2.000 a.C. está relacionada con este pueblo.

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Estos ¡reinos fueron extendiéndose por los Andes ampliando su radio de influencia y haciéndolo de forma más o menos independiente. Al no responder a un poder político centralizado y querer todos obtener dominio en la región los conflictos entre ellos, a pesar de ser culturalmente hermanos, eran constantes.

Época de esplendor

La época de esplendor de los aimaras como ciudadanos de estados independientes fue muy breve debido a que en muy poco tiempo fueron invadidos por sus vecinos los incas. Los aimaras estaban en plena expansión en 1450 cuando los incas empezaron a gestar el “Tawantin suyu”, es decir, el Imperio Inca. Dado el gran poder de los incas, quienes construyeron un imperio muy bien organizado y con una estructura militar aplastante, los aimaras acabaron siendo fagocitados y sus reinos se convirtieron en unos eslabones más de la larga y extensa organización estatal incaica.

Decadencia

Unida a la dominación incaica, menos de un siglo después se añadiría la conquista europea, acelerando la decadencia de los aimaras. En 1532 varios invasores españoles encabezados por Francisco Pizarro llegaron a tierras del aquel entonces el Inca Atahualpa. Este acontecimiento supuso el inicio del fin del imperio y, a su vez, la decadencia de la cultura aimara que pasaban a estar dominados por un lejano estado europeo con el que no podían hacer casi nada.

Los colonos españoles se asentaron en tierras bajas de las actuales Chile, Bolivia, Perú y Argentina, lugares más fértiles y adecuados para sus cultivos, desplazando a los aimaras a las zonas altiplánicas y precordilleranas. Si bien con el paso de los siglos volverían a recuperar la influencia en tierras que habían habitado con anterioridad, no sería hasta el siglo XX cuando volverían a tener un verdadero peso en sus tierras natales, sobre todo gracias a su reconocimiento como grupo étnico a proteger y promover en Bolivia y Perú.

Elementos culturales

La cultura aimara ha mantenido vivos muchos rasgos precolombinos, combinados con caracteres españoles. Su caso es bastante peculiar porque, debido a que acabaron viviendo las partes más altas de los andes y tuvieron relativo aislamiento cultural, sus rasgos más puramente indígenas sobrevivieron a los 500 años posteriores a la conquista, además de que su lengua ha permanecido bastante viva aunque minorizada.

Rituales

Como comentábamos, los aimaras han preservado muy bien costumbres de origen precolombino que, a su vez, han combinado con la doctrina católica de los colonizadores españoles. Han mantenido vivo un sustrato autóctono incorporándole un estrato cristiano, formando una muy interesante cosmovisión cristiana católica e indígena que hace de sus rituales religiosos algo único y particular.

Los rasgos indígenas se expresan muy claramente en las fiestas patronales como la celebración de la Semana Santa y del Día de los Muertos, fiestas de base cristiana, pero a la que les han incorporados elementos muy puramente aimaras. Todas estas fiestas comunitarias son celebradas en el templo cristiano y en el cementerio, siendo dirigidas por el sacerdote católico. Al igual que sucede con el resto de latinoamericanos, son indispensables el bautismo, el matrimonio y la extremaunción.

Cosmovisión

Son muchas las leyendas aimaras y reflejan la rica tradición oral de este pueblo, siendo transmitidas de padres y abuelos a hijos y nietos de forma oral. Son comunes en estas narraciones las referencias a la vida silvestre y los paisajes, entremezclándose con la vida común, dando fundamento a los conceptos de dualidad, complementariedad y reciprocidad vistos como los principios ordenadores del cosmos de los aimaras.

ACTIVIDAD 1: Leer y elaborar un cuadro sinóptico de la cultura Aymara:

Ejemplo:



ACTIVIDAD 2: Valores maristas: “PROYECTO DE VIDA” QUIEN SOY YO.


https://www.youtube.com/watch?v=hOpnG_mF9UI

Haz una reflexión sobre el video proyecto de vida.

ACTIVIDAD 3: leer la lectura critica de la cultura aymara, y contestar las preguntas:

Lectura Crítica: La Cultura Aymara, Resistencia y Re-significación en el Mundo Moderno

La cultura aymara, centrada en el altiplano andino de Bolivia, Perú y Chile, es a menudo representada a través de imágenes coloridas de sus textiles, cholitas paceñas o el místico salar de Uyuni. Sin embargo, una mirada crítica revela una historia de feroz resistencia, una profunda adaptación filosófica y una lucha constante por definir su lugar entre la tradición y la modernidad globalizada.

1. Resistencia no como Victimización, sino como Agencia Cultural

A diferencia de los incas, cuyo imperio fue quebrado por la conquista, los aymaras (junto a otros pueblos como los mapuches) presentaron una de las resistencias más largas y tenaces a la colonización española. Esta no fue una resistencia pasiva, sino activa y estratégica.

  • Guerra y Rebelión: La historia está marcada por grandes rebeliones, como la de Túpac Katari en 1781, quien sitió La Paz. Esto demuestra una capacidad de organización y un desafío directo al poder colonial que desmiente el estereotipo del indígena sumiso.

  • Resistencia Cultural Cotidiana: Más allá de las armas, la resistencia se dio en la preservación soterrada de su cosmovisión, su estructura social (el ayllu) y su idioma. Bajo un sistema colonial y republicano diseñado para explotarlos y asimilarlos, los aymaras practicaron lo que el sociólogo boliviano Silvia Rivera Cusicanani llama "un mundo ch'ixi" (manchado, mezclado pero no fusionado): adoptaron elementos externos (como el catolicismo) pero los resignificaron para servir a sus propias lógicas culturales internas. La Virgen María puede ser también la Pachamama.

2. El Ayllu: ¿Utopía Comunitaria o Estructura en Tensión?

El ayllu es la base de la organización social aymara. Se lo idealiza como un modelo de reciprocidad y comunidad frente al individualismo occidental. Una mirada crítica debe examinar sus complejidades.

  • Fuerza Cohesiva: El ayllu es un sistema de parentesco extenso que organiza el trabajo (ayni), la redistribución (mink'a) y la toma de decisiones colectivas. Ha sido un mecanismo clave de supervivencia que permitió a las comunidades manejar recursos escasos en un ambiente hostil y resistir la desintegración social.

  • Tensiones Internas y Externas: Sin embargo, el ayllu no es una arcadia pacífica. Tiene sus propias jerarquías internas, disputas por la tierra y por el liderazgo. Además, en el mundo moderno, se enfrenta a presiones enormes: la migración juvenil a las ciudades debilita su estructura, y la economía capitalista individualista choca frontalmente con sus principios comunitarios. El ayllu hoy es una institución en constante negociación y adaptación, no un fósil del pasado.

3. La Filosofía Andina: ¿Cosmovisión o Estrategia Discursiva?

Conceptos como la Pachamama (Madre Tierra), el Vivir Bien (Suma Qamaña / Buen Vivir) y la complementariedad de opuestos (chacha-warmi, hombre-mujer) han ganado relevancia global. Una lectura crítica pregunta:

  • Apropiación y Banalización: Estos conceptos han sido incorporados en constituciones (Bolivia y Ecuador) y discursos de ONGs ecologistas. ¿Se está produciendo una folklorización de una filosofía profunda? ¿Se usa el "Vivir Bien" como un eslogan vacío que enmarca proyectos de desarrollo que poco tienen que ver con su significado original de equilibrio y comunidad?

  • ¿Filosofía o Religión?: La relación con la Pachamama no es una mera "conciencia ecológica" moderna. Es una relación recíproca y ritual de carácter religioso. Las ofrendas (como las llamas a la tierra) no son un "gracias" simbólico, sino un trueque necesario para asegurar el sustento. Separar la filosofía de la práctica ritual es perder su esencia.

4. Los Aymaras Urbanos: La Revolución de la "Cholita Paceña"

El estereotipo del aymara como campesino ligado a la tierra es hoy insuficiente. La migración masiva a ciudades como El Alto (Bolivia), una ciudad de mayoría aymara, ha creado una nueva identidad dinámica y desafiante.

  • Re-significación de Símbolos: Los aymaras urbanos no necesariamente abandonan su cultura; la reinventan. La "cholita paceña" es el ejemplo máximo: toma la pollera (falda tradicional impuesta por los españoles), el sombrero bombín y las mantas, y los convierte en símbolos de orgullo, empoderamiento económico y resistencia identitaria. De ser un marcador de opresión y racismo, la pollera se ha transformado en un estandarte de éxito e identidad.

  • Economía Híbrida: En El Alto, la economía aymara es una mezcla de prácticas comunitarias (redes de parentesco para los negocios) y un capitalismo feroz y emprendedor. El éxito económico de muchos comerciantes aymaras les ha dado un poder político que antes les era negado, desafiando las estructuras de poder tradicionalmente criollas y mestizas.

5. Luchas Contemporáneas: Más Allá del Folclore

La cultura aymara no es estática. Enfrenta desafíos cruciales en el siglo XXI:

  • Extractivismo vs. Pachamama: Muchas comunidades aymaras se encuentran en la primera línea de conflicto contra megaproyectos mineros o de hidrocarburos que amenazan sus fuentes de agua y su modo de vida. Aquí, la defensa de la Pachamama se vuelve un acto político concreto contra los estados (incluso aquellos que se declaran "plurinacionales") y las multinacionales.

  • Tensión Generacional: Los jóvenes aymaras navegan entre el mundo globalizado de internet y las expectativas de sus comunidades. ¿Cómo se transmite la lengua y los conocimientos cuando la migración y la educación formal occidental los alejan del ayllu?


Preguntas para la Reflexión y el Análisis Crítico

  1. Resistencia y adaptación: La cultura aymara no solo "sobrevivió" a la colonización, sino que se adaptó estratégicamente. ¿En qué formas crees que esta resistencia activa (a diferencia de una visión pasiva de víctima) cambia la percepción que tenemos de los pueblos indígenas?

  2. El ayllu en el siglo XXI: ¿Puede una estructura social comunitaria como el ayllu sobrevivir y ser relevante en un mundo dominado por la economía capitalista global y la migración urbana? ¿Qué aspectos del ayllu podrían ser valiosos para repensar modelos de organización social moderna?

  3. Filosofía y política: Conceptos como el "Vivir Bien" (Suma Qamaña) han sido adoptados por gobiernos y agendas globales. ¿Crees que existe el riesgo de que se vacíen de su significado original y se conviertan en simple "marketing político"? ¿Cómo se puede evitar esto?

  4. Identidad urbana: El fenómeno de la "cholita paceña" muestra cómo los símbolos de opresión pueden transformarse en emblemas de poder. ¿Conoces otros ejemplos en la historia donde un grupo marginado resignifica un símbolo negativo para convertirlo en positivo? ¿Qué nos dice esto sobre la naturaleza dinámica de la cultura?

  5. La paradoja del desarrollo: Muchas comunidades aymaras se oponen al extractivismo en defensa de la Pachamama, pero al mismo tiempo demandan mejor acceso a educación, salud y tecnología (productos del "desarrollo" occidental). ¿Es posible resolver esta contradicción? ¿Cómo se puede conciliar el "Vivir Bien" con las aspiraciones materiales de las nuevas generaciones?

  6. Lengua e identidad: El aymara es una lengua que se ha mantenido viva contra todo pronóstico. En la era de internet y la cultura global en inglés, ¿qué desafíos y oportunidades existen para la preservación y vitalidad de las lenguas indígenas?

  7. ¿Quién habla por los aymaras?: ¿Cómo evitamos, desde el mundo occidental o académico, caer en la romanticización o la distorsión de la cultura aymara? ¿Cuál es la importancia de escuchar las voces intelectuales y líderes aymaras themselves (como Silvia Rivera Cusicanani o Felipe Quispe) en lugar de solo hablar "sobre" ellos?


ACTIVIDAD 4: observar el video de la cultura aymara, y elaborar un ensayo.





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